Seré capaz de perderme en tu promesa? Tendré el valor de creer lo increíble y tirarme enceguecida en la montaña rusa de tu cuerpo.
Te vi y al verte se me reseteo la cabeza y se me vació el corazón, solo quería saborearte y saber que me elegías una vez mas.
Tan iluminadamente oscuro me esperabas como siempre en la misma esquina y con la misma postura rea y machista, levantabas tus lentes y me guiñabas un ojo …. Subíamos a tu auto y nos perdíamos en la clandestinidad de mi amor, que lógicamente era solo mio.
Hacia varios años que no recibía noticias tuyas, ambos habíamos elegido direcciones diferentes, pero creo que en nuestros inconscientes siempre se prendía la luz de nuestras andanzas.
Empezamos de chicos, pero a pesar de todo lo que los unió nunca estuvimos juntos; siempre el miedo me llevo a disfrazar el “te amo tanto” por un “ que buena piel que tenemos” … perdón si pierdo la compostura y me voy en detalles; pero eso es él: me desorienta y me hace olvidar quien debo … digo quien elegí ser.
Decía que nos conocíamos hace mucho, “esto” como le gusta decirle a él empezó cuando yo tenía 18 y el 25 años, o sea, hace mas de 20 años. En esa época yo solo quería ser alguien en la vida y me empeñaba en eso; él, solo quería pasarlo bien; la vida nos cruzo y bla bla bla. Ahí y así empezó el comienzo de mi fin; desde ese momento me hice adicta a ese hombre.
El 20 de marzo de 1984 me dirigí a la esquina de siempre y lo vi parado, corrí hacia él y le di un corto pero intenso beso; se negó. Lo mire confundida preguntándome ¿Qué le pasa, si todos los meses teníamos la misma metodología?
-Mañana me caso, solo quería que lo sepas
Hacia 5 años que religiosamente cometíamos el mismo pecado de la misma forma y nunca me menciono una novia - pensé
Sentí una fuerte explosión que retumbo en todo el barrio, luego descubrí que lo que se rompió fue algo en mi interior, algo llamado corazón. Se fue y ahí me quede llorando en la esquina, nuestras esquina, les dije que lo amaba no?
Pasaron los años, pasaron los besos y yo también me case y jugué a la felicidad con alguien más, pero nunca pude olvidarme de él.
Hoy tengo 38 años y tengo que confesarles que los nervios me están consumiendo la carne, en media hora voy a encontrarme con el hombre que me rompió el corazón hace 15 años ¿estaré haciendo bien? ¿estaré reincidiendo en este pecado carnal?
Solo se que me separe hace años, que me siento sola y que si no fuese por esa invitación de facebook mi alma no estaría saltando tan alto como salta en este momento. ¿Seguirá casado? ¿Seguirá siendo tan él?
El reloj marco las 5 de la tarde, salí de la oficina y le pedí al taxista que me lleve a nuestra esquina. El cuerpo me temblaba y el corazón se me salia del pecho; mezcla de adrenalina, pasión, locura e incertidumbre..... Pufff hacia 15 años que no me sentía así ...
... Y ...
Te vi y al verte se me reseteo la cabeza y se me vació el corazón, solo quería saborearte y saber que me elegías una vez mas.
Tan iluminadamente oscuro me esperabas como siempre en la misma esquina y con la misma postura rea y machista, levantabas tus lentes y me guiñabas un ojo …. Subíamos a tu auto y nos perdíamos en la clandestinidad de mi amor, que lógicamente era solo mio.
Cada vez que te leo se me estremece el alma... siento que escribis sobre mi propia vida y que pones en palabras mi más profundos sentimientos....
ResponderEliminarVicky todos tenemos una tragicomica adentro ... y a todos nos paso de amar asi
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