Leer esta noticia de color (negro) me llevo a pensar que cada uno de nosotros llevamos consigo y cargando sobre nuestra espalda un pequeño "cementerio de amor". Muchas veces nos resulta inevitable deshacernos de aquellos elementos que alguna vez nos recordaron lo felices que éramos o las locuras que hacíamos por culpa del enamoramiento. Automáticamente, empecé a repasar en mi mente todas las cosas que tenía guardadas, escondidas y que alguna vez me habían hecho sonreír; no pude evitarlo, soy impulsiva, corrí a buscarlas y al momento de verlas sentía como lentamente las lágrimas caían por mi cara. Sin dudas, el dolor se apoderó de mí y el fracaso me congelo el cuerpo… Me sentí triste, frustrada y ante ese sentimiento (que pensé que ya no existía) releí la nota intentando encontrar respuestas mágicas.
(...) En vez de quemarlos en la hoguera, la idea es donarlos a este espacio común para la memoria. Como terapia, como alivio pero también como rito (…) A su paso, el museo incorpora "las cenizas" de experiencias personales que a la vez representan a la cultura local y los arquetipos universales (…)
Busque una bolsa, y lentamente fui cavando en lo más profundo de mis secretos para encontrar lo que alguna vez había escondido; protegiéndolo de los otros y de mi. Quería participar de ese rito, quería ser parte de ese grupo de personas que se animaban a dejar atrás al pasado… pero ¿Podría deshacerme de esa tapita de coca cola que una vez me había decorado, o de esa cadenita que con tanto esfuerzo me había regalado, o tirar por fin ese anillo que sellaba el compromiso de un gran amor? ¿Sería capaz de entregar a un completo desconocido la cantidad de cartas que expresaban todo el tiempo que esperaste para que la vida nos juntara? ¿Tendría el valor de "donarlos" a un espacio que difunda la "memoria"?
No pude evitar pensar en mis amigas, y en las amigas de mis amigas; en todos los que alguna vez sufrieron por amor. Crear el MUSEO DE LAS RELACIONES ROTAS en Argentina sería el negocio del año. ¿Cuántos corazones destrozados pululan por las calles? Cuantas decepciones, promesas, infidelidades, obsesiones, desencuentros y amores incurables nos cruzamos a diario? La respuesta a todas las preguntas es miles; porque somos seres que necesitamos AMAR, necesitamos de un otro para sentirnos completos; porque sabemos que el sufrir puede ser una de las opciones, pero a pesar de ello apostamos todo para sentir un momento de FELICIDAD.
Y es allí, donde luego de encontrarme sentada con una bolsa en la mano derecha y un recorte de revista en la izquierda me di cuenta que al acceder al rito de la entrega los recuerdos seguirian VIVOS, MAS VIVOS QUE NUNCA en la memoria de los demás; VIVOS en los ojos de cada una de las personas que viera el sello de nuestra historia. Que tal vez no valia la pena entregarlos y que no debia sentirme fracasada de tenerlos conmigo, sino ORGULLOSA de haber podido salir integra de cada una de esas experiencias, de haber tenido la capacidad de decir BASTA y darme cuenta que eso ya no aportaba nada a la Vida que yo deseaba . Con el mismo cuidado, guarde cada uno de mis trofeos, de mis victorias personales; y los deje alli, descansando, pero listos para que cada vez que me sienta caer por amor y sienta que no puedo seguir adelante; los vea y descubra que el poder de la decision de estar mejor esta en mi interior.
Y recuerden que NO SOY TRAGICOMICA, solo trato que lo malo suene un poco mejor
Excelente, Ald!!
ResponderEliminarMuy bueno!!!
ResponderEliminarGRACIAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAS :)
ResponderEliminarMe encanto!!!!
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